La mandioca brava, Manihot grahamii, es una especie de árbol pequeño de la familia de las euforbiáceas, autóctona de Sudamérica, se la encuentra en Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Caducifolio, alcanza de 3 a 6 (9) m de altura, y tiene un crecimiento rápido y se lo utiliza en jardines y como árbol ornamental urbano. Crece espontáneamente a los costados de los caminos y en terrenos abandonados. Sus flores son amarillentas verdosas, con pétalos y se presentan en panículas terminales laxas. Florece en primavera y verano.[1]
Fruto tricoco, de 3 cm de diámetro, con tres semillas; maduros se abren en el árbol despidiendo con velocidad las semillas, a varios metros. Semilla no comestible.
Se reproduce fácilmente por semillas.
Los guaraníes utilizan sus hojas como febrífugas. Su denominación terapéutica es moãro’y: medicina fría.
Manihot grahamii fue descrito por William Jackson Hooker y publicado en Icones Plantarum 6: pl. 530. 1843.[2]
La mandioca brava, Manihot grahamii, es una especie de árbol pequeño de la familia de las euforbiáceas, autóctona de Sudamérica, se la encuentra en Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.